En la 53ª Asamblea General de la Organización de los Estados Americanos (OEA), el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, hizo un llamado a los países miembros para unirse a la coalición internacional liderada por Washington en la lucha contra el tráfico de fentanilo.
Durante el evento celebrado en Washington, Blinken anunció el lanzamiento de una nueva coalición global destinada a abordar las amenazas a la seguridad y la salud pública derivadas de la producción y el tráfico de fentanilo y otras drogas sintéticas. El secretario de Estado alentó a los países de la región a unirse a este esfuerzo conjunto.
Blinken destacó que Estados Unidos ha sido el país más afectado por el consumo de fentanilo, pero advirtió que este problema se está extendiendo, especialmente en el continente americano.
Con el objetivo de frenar el tráfico de fentanilo, un opioide sintético fabricado en México con precursores provenientes de Asia y que causa miles de muertes por sobredosis cada año, Estados Unidos está presionando para tomar medidas.
El secretario de Estado mencionó que en 2022, 110,000 personas perdieron la vida en Estados Unidos debido al consumo de drogas, la gran mayoría de ellas por opioides sintéticos, lo cual ha causado un sufrimiento devastador a miles de familias.
Blinken enfatizó que ningún país del continente quedará exento de los efectos de esta lacra ni de los grupos del crimen organizado transnacional que se benefician de ella, y que la única forma de enfrentar este desafío es uniendo esfuerzos.
En el mismo evento, Blinken anunció la convocatoria de una reunión virtual de ministros de todo el mundo para el 7 de julio, con el propósito de establecer una coalición internacional contra los opioides.
El Departamento de Estado de Estados Unidos tiene como objetivo reunir nuevamente a esta coalición en el marco de la 78ª Asamblea General de las Naciones Unidas, con el fin de compartir políticas y avances en la lucha contra el fentanilo.
Cabe destacar que el tráfico de esta sustancia fue uno de los temas abordados por Blinken durante su reciente visita a China, país que niega tener responsabilidad en la exportación de opioides.
Por su parte, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, también ha negado la existencia de un problema de fentanilo en su país y ha acusado a Estados Unidos de no hacer lo suficiente para frenar el consumo dentro de su propio territorio.
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