En un giro sorprendente, el Frente Amplio en Colima ha presentado denuncias contra la gobernadora Indira Vizcaíno, acusándola de desviar recursos públicos en apoyo a Claudia Sheinbaum, destacada miembro de Morena. Los presidentes estatales del PRI, PAN y PRD, Arnoldo Ochoa, Julia Jiménez y José Alberto Cisneros, respectivamente, han llevado estas acusaciones ante el Instituto Electoral del Estado de Colima y la Contraloría General del Estado.
El escándalo estalló a raíz de una revelación de Latinus el 31 de agosto, que puso al descubierto el movimiento de recursos públicos desde Colima hacia Jalisco, con el objetivo de fortalecer la campaña de Claudia Sheinbaum. Testimonios de funcionarios de alto nivel que participaron en esta operación revelaron que, además de enviar recursos durante dos meses a Jalisco, el gobierno estatal instaló un cuartel operativo en Guadalajara. Desde esta ubicación, los funcionarios públicos trabajaron en estrategias para respaldar a Sheinbaum en los distritos electorales donde se llevaron a cabo encuestas para seleccionar al candidato presidencial de Morena.
Además de las denuncias contra la gobernadora Vizcaíno, los dirigentes estatales del PRI, PAN y PRD han incluido en sus acusaciones a 15 funcionarios públicos por su «probable participación en los hechos». En el documento presentado ante las autoridades correspondientes, se afirma que estos funcionarios no actuaron por sí solos y que existen autores intelectuales detrás de estas acciones, señalando directamente a la gobernadora.
Una revelación adicional es que el «moche» del 5% del sueldo que se solicitó a funcionarios de confianza del gobierno de Colima, revelado el 1 de agosto, se utilizó para financiar esta operación a favor de Sheinbaum. Los dirigentes del Frente Amplio en Colima afirman que es evidente que una gran cantidad de recursos del erario público se utilizaron en conductas que violan la ley.
En una entrevista, los líderes del Frente Amplio por México en Colima subrayaron que este esquema de apoyo a Sheinbaum se repitió en varios estados. Arnoldo Ochoa, del PRI, afirmó que «hubo una conducta bastante planificada con la actuación directa de los gobernadores y gobernadoras que pertenecen a Morena».
Este escándalo político no solo sacude la estabilidad política en Colima, sino que también arroja luz sobre las prácticas cuestionables de financiamiento de campañas en México y plantea interrogantes sobre la integridad del proceso electoral. A medida que se desarrolle la investigación, se espera que surjan más detalles sobre el alcance de este presunto desvío de recursos públicos en favor de Claudia Sheinbaum y su impacto en la política mexicana.