América y Cruz Azul aburren; nada para nadie

En un partido aburrido, sin ton ni son, con jugadores que caminaban en la cancha; con un equipo como América que podía y nunca quiso y con Cruz Azul que quería y nunca pudo, el partido de Ida de la Semifinal terminó por dejar un nefasto empate sin anotaciones en un abarrotado Estadio de Ciudad de los Deportes pintado de amarillo.

Tuvieron que pasar 58 minutos para que el partido despertara, esto fue gracias a dos llegadas escuetas por parte de América, en donde el portero Kevin Mier se convirtió en figura al evitar que las Águilas perforaran su portería. Ahí, el cuadro de André Jardiné se acordó de su potencial y comenzó a tener un poco más de ahínco sobre la cancha, pero sin mostrar una presión que ayudara a ganar el partido.

La polémica no estuvo exenta de un partido de esta importancia y en el segundo tiempo, Rodolfo Rotondi se salvó de que el silbante Óscar Mejía lo expulsara por una plancha imprudente sobre Kevin Álvarez, que ni el silbante, ni el VAR tuvieron a bien señalar.

Cruz Azul, por su parte, fiel a su costumbre y demostrando el por qué terminó el torneo como líder general de la competencia, intentó tocar el balón por todos los sectores de la cancha, desde el portero Mier que jugaba como un líbero más, hasta los defensores y mediocampistas, mientras que los atacantes, en este caso Ángel Sepúlveda y luego el griego Giorgos Giakoumakis, que parecían llaneros solitarios.

Llegaron los movimientos, Martín Anselmi buscó que su Máquina mantuviera la tendencia ofensiva, con cambios que ayudaran a buscar el marcador, pero los cambios ordenados por la banca americanista fueron factor para contener el medio campo y defender su portería desde el ombligo de la cancha.

El partido de Ida quedó a deber, dos equipos que históricamente habían entregado partidos dramáticos y series dignas para películas de Hollywood, incluso finales, con revanchas, penales y lluvia, ahora fue todo lo contrario.

Es por eso, que para la Vuelta, la misma que se disputará el próximo domingo a las 19:00 horas en el mismo escenario, pero que ahora se vestirá de Azul, el Estadio de Ciudad de los Deportes, la misión de América será ganar por cualquier marcador; mientras que para La Máquina basta un empate, sin goles como hasta ahora, o por cualquier pizarra, para poder avanzar a la Gran Final del Torneo Apertura 2024.

Horarios y fechas oficiales de las semifinales del Apertura 2024

¡Horarios oficiales! Después de que se disputaran los Cuartos de Final en donde se presentaron resultados sorpresivos, como la eliminación de Tigres y de Toluca, finalmente están definidos los días y horarios de los encuentros de Semifinal del Apertura 2024 y este lunes, tras una reunión en las oficinas de la FMF, los representantes de los cuatro equipos clasificados se pusieron de acuerdo para la disputa de estos encuentros.

Los cuatro equipos que estarán contendiendo por el título del futbol mexicano son Cruz Azul, Monterrey, Atlético San Luis y América. Con esto, oficialmente el duelo entre Atlético San Luis y Monterrey se jugará el miércoles 4 de diciembre a las 21:00 horas en el Estadio Alfonso Lastras, mientras que el regreso será el sábado 7 de diciembre a las 20:00 horas en el Estadio BBVA de Guadalupe, Nuevo León.

Por su parte, el histórico enfrentamiento entre América y Cruz Azul se disputará el próximo jueves 5 de diciembre en punto de las 20:00 horas; mientras que la vuelta será el domingo 8 de diciembre en el Estadio de Ciudad de los Deportes a las 19:00 horas. Esto se debe a que la Plaza de Toros México, que está a un costado del inmueble de La Máquina, tiene un evento musical el sábado, por lo cual la dirigencia de los Cementeros determinó aprovechar su condición de líder para poner la fecha y el horario que más le convino.

Columbus conquista Monterrey y se clasifica a la final de la Champions Cup

¡No habrá final mexicana! Pese a cerrar en el Estadio BBVA, los Rayados no pudieron hacer valer su condición de local y fueron eliminados en las semifinales de la Concacaf Champions Cup en manos del Columbus Crew por un marcador de 1-3 (2-5 en el global), y los estadounidenses se disputarán la corona ante el Pachuca.

En un inicio trepidante, las acciones estuvieron bastantes parejas para ambos equipos, teniendo llegadas muy peligrosas, pero con Monterrey teniendo las más claras. Al minuto 11’ los locales encontraron la ruptura en la línea defensiva de los visitantes que terminó en un autogol del defensa Yevgen Cheberko y puso en ventaja a la Pandilla.

Sin embargo, las cosas se les complicarían al cuadro de Fernando Ortiz, ya que los de amarillo más allá de intimidarse por el error cometido, empezaron a amedrentar la cabaña que defendió Esteban Andrada y, justamente, una equivocación del argentino que cedió el balón al centro del campo en un intento de salida, permitió que Aidan Morris igualara las condiciones en tiempo agregado del primer tiempo.

La desgracia se concretó apenas en el arranque de la parte complementaria, con apenas cinco minutos disputados, un gol de vestidor cayó como agua fría para los regios, Diego Rossi puso el último clavo en el ataúd al meter el esférico al fondo de las redes en el 49’.

Por más que los blanquiazules se volcaron al frente para revertir la situación, Columbus se volvió un máster al utilizar la desesperación de los locales a favor. Todavía en la recta final, Jacen Russell-Rowe puso la estocada final al triplicar la ventaja al 89’ y en el 97’ Christian Ramírez se dio el lujo de errar un penal que fue atajado por Andrada.

El siguiente gran reto para los negriamarillos será meterse en la cancha del Estadio Hidalgo para pelear el título de campeón frente a los Tuzos, partido que se jugará el sábado 1 de junio, fecha a falta de confirmarse por Concacaf.

Bayern supera por la mínima a Arsenal y pasa a semifinales de Champions

Un único tanto de Joshua Kimmich le sirvió a FC Bayern München para vencer al Arsenal y meterse en las semifinales de la Champions League. Los de Tuchel nunca dominaron en el juego pero les superaron en inteligencia, sin tomar riesgos y aprovechando su ocasión más clara. Con Borussia Dortmund también en semis, sólo dos partidos les separan de otra final alemana en Wembley.

Después de una ida en Londres de la que FC Bayern sacó un buen resultado, todo dependía de ganar como fuera en casa al Arsenal para meterse en semifinales de Champions, tal y como hizo Borussia Dortmund el martes. Ya en el primer partido quedó en evidencia que esa superioridad en el juego y también en lo anímico que Los Bávaros habían tenido sobre los Gunners en la última década se quedó en el pasado, y con el pitido inicial de la vuelta continuó la tónica de una eliminatoria muy igualada.

La lesión de Gnabry y la sanción de Davies hizo que Thomas Tuchel reestructurase toda la banda izquierda, colocando a Mazraoui de lateral a pierna cambiada y a Guerreiro más adelantado. El resto se mantuvo igual que hace una semana y tenía sentido porque en el Emirates funcionó, pero la ilusión que muchos tenían por asediar hasta encontrar el gol se desvaneció rápidamente. El Arsenal no se amedrentó ante el escenario y Bayern, aunque a veces quiso, no logró que se sintieran inferiores ni cediéndoles el balón, porque había sensación de peligro, ni tratando de adueñarse ellos del esférico porque no tenían ideas para progresar.

Las ocasiones que en la ida Bayern pudo aprovechar, en este primer tiempo no lo hizo porque apenas tuvieron llegadas serias. Lo más cerca que estuvieron los locales de marcar fue en un centro de Mazraoui que casi se envenena tras rebotar en un defensa, y en el caso de los visitantes fue con un disparo sin oposición de Martinelli en la frontal que acabó cómodamente en las manos de Neuer. Aunque todos podían meter una marcha más, todavía nadie tenía el valor para arriesgar.

Tras el descanso, FC Bayern salió un poco más despierto y prueba de ello fueron dos palos consecutivos de Goretzka y Guerreiro. Tuchel esperaba que la inexperiencia del Arsenal pasara factura y que, siendo conservadores y esperando a que con el paso de los minutos notara su rival el desgaste, llegase el gol. Un planteamiento muy alejado de lo que suele acostumbrar el club muniqués pero que funcionó. En el minuto 63, una segunda jugada derivó en un centro de Guerreiro que Kimmich, llegando desde segunda línea, cabeceó con furia al fondo de la red.

Todas las piedras estaban en el tejado de los londinenses en la última media hora y Bayern, fiel a su plan, se limitó a intentar forzar algún error que les permitiera sentenciar el partido y la eliminatoria. Esta vez no salió a pedir de boca y no llegó el segundo tanto, pero el Arsenal nunca tuvo una oportunidad clara para el empate, llegando hasta a desesperarse en el tramo finalLos Bávaros apenas tomaron riesgos en 180 minutos y no fallar fue lo que les dio el pase a las semifinales, superando la barrera de los cuartos de final por primera vez en cuatro años.