Israel y Hezbolá acercan un acuerdo de alto el fuego en medio de intensas hostilidades
El conflicto entre Israel y Hezbolá podría llegar a su fin en breve, ya que ambos lados se encuentran cerca de alcanzar un acuerdo de alto el fuego, según las declaraciones del embajador israelí en Estados Unidos, Michael Herzog. El acuerdo podría concretarse «en cuestión de días», a pesar de que las hostilidades continúan en el terreno, con ataques aéreos y disparos de cohetes.
Avances diplomáticos y crecientes tensiones militares
Los esfuerzos diplomáticos para alcanzar una tregua se intensificaron la semana pasada, cuando el mediador estadounidense Amos Hochstein informó sobre avances significativos tras sus reuniones en Beirut, Israel y Washington. Sin embargo, las tensiones sobre el terreno siguen aumentando, con potentes ataques aéreos israelíes que dejaron al menos 29 muertos en Beirut, y una de las mayores salvas de cohetes lanzadas por Hezbolá, con 250 misiles disparados.
A pesar de la creciente violencia, Michael Herzog expresó en una entrevista con la emisora israelí GLZ que el acuerdo de alto el fuego estaba «muy cerca». «Solo tenemos que cerrar las últimas esquinas», señaló, sugiriendo que las conversaciones avanzan, pero que aún restan detalles para finalizar el acuerdo.
La postura de los líderes israelíes y de Hezbolá
Sin embargo, la postura del gobierno israelí no está completamente unificada. El ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben-Gvir, se mostró en contra del alto el fuego y abogó por continuar la guerra hasta alcanzar una «victoria absoluta». En un mensaje a través de la red social X, Ben-Gvir instó al primer ministro Benjamín Netanyahu a rechazar el acuerdo, afirmando que «¡no es demasiado tarde para detener este acuerdo!».
Desde el lado de Hezbolá, el líder del grupo, el jeque Naim Qasem, afirmó la semana pasada que la organización chií había revisado la propuesta estadounidense de alto el fuego. Qasem señaló que la decisión final sobre la tregua ahora dependía de Israel, quien había asumido la responsabilidad de llevar la situación hacia un cese de las hostilidades.
El conflicto se convierte en una guerra a gran escala
El conflicto entre Israel y Hezbolá se intensificó en septiembre, cuando el ejército israelí pasó a la ofensiva con intensos bombardeos en el sur de Líbano y envió tropas al área. En el transcurso de la guerra, Israel ha infligido graves daños a las posiciones de Hezbolá, matando a altos mandos del grupo y destruyendo áreas clave en los suburbios del sur de Beirut, donde Hezbolá tiene una fuerte presencia.
El ejército israelí también realizó nuevos ataques aéreos en las últimas horas, centrando su ofensiva en los suburbios de Dahiyeh, conocidos como el bastión de Hezbolá. Las autoridades israelíes indicaron que habían atacado el cuartel general militar de Hezbolá, aunque también advirtieron a los residentes locales de evacuar la zona, que en gran parte está desierta debido a los constantes bombardeos.
La situación humanitaria en Líbano
El impacto del conflicto ha sido devastador para la población civil en Líbano. Más de un millón de personas han sido desplazadas debido a los ataques con cohetes de Hezbolá, que comenzaron en apoyo de Hamás tras la guerra de Gaza en octubre de 2023. La diplomacia internacional se ha centrado en buscar una solución que permita el regreso seguro de los desplazados, además de restablecer la estabilidad en la región.
El marco de la Resolución 1701 de la ONU
Los esfuerzos por lograr un alto el fuego definitivo se han basado en la Resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU, que puso fin a la guerra entre Israel y Hezbolá en 2006. Esta resolución exige el retiro de los combatientes de Hezbolá a una distancia de 30 kilómetros de la frontera israelí y el despliegue del ejército libanés en la zona fronteriza para garantizar la seguridad y la desmilitarización.