Uriel Carmona, el fiscal general de Morelos, fue liberado del penal del Altiplano en Almoloya, Estado de México, en la madrugada de este jueves, pero poco después fue nuevamente detenido debido a una acusación de tortura.
A las 12:57 de la madrugada, agentes de la fiscalía anticorrupción de Morelos cumplieron una orden de aprehensión en su contra. La orden había sido emitida por un juez federal debido a presuntos actos de tortura contra un individuo apodado «El Diablo», quien enfrenta acusaciones por el asesinato de tres jóvenes trabajadores del Instituto Nacional de Salud Pública en abril pasado.
A pesar de que los agentes morelenses llevaron a cabo la detención, la investigación fue iniciada por la Fiscalía General de la República (FGR).
El miércoles, Carmona había obtenido una tercera suspensión por parte de tribunales colegiados federales, lo que le permitió quedar libre de las acusaciones de la Fiscalía de Justicia de la Ciudad de México. La defensa del fiscal alega que sería trasladado al penal federal de Atlacholoaya, en Morelos; sin embargo, según el Registro Nacional de Detenciones, Carmona aún se encuentra en el Altiplano. Las autoridades no han proporcionado información clara sobre su ubicación actual.
La audiencia relacionada con la nueva acusación de tortura contra el fiscal está programada para este jueves a la 1:00 de la tarde en los tribunales del penal estatal. Esta es la cuarta vez que Uriel Carmona ha sido detenido y liberado en un período relativamente corto.
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