Kevin Spacey, el reconocido actor, ha comparecido ante el Tribunal de la Corona de Southwark en Londres, donde se ha declarado inocente de 12 cargos de delitos sexuales supuestamente cometidos contra cuatro hombres en el Reino Unido entre los años 2001 y 2013.
En un enfrentamiento contundente con los fiscales durante el juicio por agresión sexual, Spacey calificó las acusaciones en su contra de «absoluta estupidez». Según los testimonios de los acusadores, Spacey los habría manoseado de manera agresiva y en uno de los casos practicado sexo oral mientras la víctima se encontraba desmayada en el suelo.
Durante el interrogatorio por parte de la fiscal Christine Agnew, Spacey negó rotundamente las acusaciones y afirmó que los denunciantes habían inventado toda la historia. La fiscal le hizo referencia a un denunciante en particular que alega que el actor le agarró dolorosamente la entrepierna en la década de 2000, a lo que Spacey respondió utilizando términos en el argot británico para negar la veracidad de la acusación.
Spacey también mencionó que creía que los acusadores estaban motivados por el dinero. En respuesta, la fiscal preguntó si el actor solía recurrir al «agarre de entrepierna» cuando se encontraba con hombres por primera vez, a lo que Spacey respondió que no y mostró su oposición a ese tipo de comportamiento.
En el transcurso del interrogatorio, Spacey admitió haber hecho una «torpe insinuación» a uno de los denunciantes, pero negó haber cometido una agresión sexual. Afirmó que había malinterpretado las señales que creía que le estaban enviando y aceptó su error. Sin embargo, negó haber realizado un agarre o manoseo, sino más bien un contacto suave.
En cuanto a los encuentros con los otros denunciantes, Spacey los describió como interacciones consentidas y afirmó que si hubiera habido alguna incomodidad o límite, nadie se lo había comunicado.
En resumen, Kevin Spacey se ha declarado inocente de los cargos por delitos sexuales en su contra y ha negado todas las acusaciones presentadas en su contra durante el juicio en el Tribunal de la Corona de Southwark en Londres.
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